El diccionario de inglés Oxford reconoció el término ‘cat café’ en su versión online en agosto de 2015.

Taiwan fue el primer país donde se abrió un cat café, en Taipei allá por 1998: Cat Flower Garden. Pero el concepto nació en Japón, debido a la falta de tiempo o espacio de los hogares de sus habitantes para poder hacerse cargo de una mascota. Así que los cat cafés resultaron la solución perfecta para disfrutar de la compañía de los felinos en un entorno agradable.

Estos lugares siempre tienen estrictas reglas: lavarse bien las manos con jabón especial, leer las instrucciones que explican cómo respetar a los gatos, véase no cogerlos en volandas a la primera de cambio, permitir que te huelan antes de tocarlos y otras cosas de sentido común como no despertar a uno que esté durmiendo o no hacer fotos con flash.

Purrffect Cat Café, Georgetown (Malasia)

Durante este viaje he tenido la suerte de encontrarme con varios cat cafés (otra razón para adorar Asia). El primero que visité fue en GeorgetownPenang, una de las islas de Malasia: Purrffect Cat Café. Dos alturas: en la planta de abajo una tienda con todo tipo de productos relacionados con el mundo gatuno y arriba, el café.

Cat Café Ubud, Bali

Paseando por Ubud, en Bali, tropecé uno de los Cat Café que hay en la isla. Y resultó estar prácticamente en frente de uno de los hostales donde me quedé, así que los dueños del garito acabaron sabiendo el desayuno que iba a pedir al tercer día de ir allí 🙂

Cat Cafés en Chiang Mai, Tailandia

En Chiang Mai, la principal ciudad al norte de Tailandia, hay varios Cat Cafés, he localizado al menos siete. Visité Cha Mee Maew, con el espectacular gato blanco que me acompaña en la foto, y The Something like Cat Café.